¿Alguna duda?
Ha corrido mucha tinta sobre el vergonzoso episodio del “conejo” de la Guajira, pero no puedo pasar de agache como Juampa, Chamberlain Villegas, De la Calle, Sergio Jaramillo, Juan Fernando Cristo, Roy Barreras y Armando Benedetti, auspiciadores ocultos de este modelo de pedagogía de paz.
Lo que vimos en vivo es una demostración de lo que serán las Zonas de Concentración, Terrapaz, o como quieran llamarlas, sean esta diez, como lo aseguran Juampa y De la Calle, setenta y cinco que estiman otros mejor informados o las ciento veinticinco que Fanny Kertzman dice que aparecen en documento que se filtró de la ONU.
Nadie entendió que para este esperpento en uno de los aviones a disposición de Jaramillo, como parte de los vuelos secretos, se hayan trasladado desde la Habana a Valledupar a ‘Iván Márquez’, ‘Joaquín Gómez’, ‘Rodrigo Granda’ y ‘Jesús Santrich’ acompañados por personas de los países garantes, Noruega y Cuba; que de allí un helicóptero con emblemas de la Cruz Roja Internacional los lleve a El Conejo; que desde Venezuela, cuya frontera esta cerrada, puedan llegar parte de los quinientos guerrilleros fuertemente armados, algunos en vehículos con placa venezolana acompañados ilegalmente de la guardia nacional bolivariana; que los guerrilleros no fueran requisados pese a estar vigente la prohibición de porte de armas aún con salvoconducto; que el ejército y la policía desaparezcan por orden expresa de Chamberlain Villegas; que todos en coro digan que no sabían, cuando se armaron tarimas, instaló sonido y llegaron buses con campesinos a los que se les ofrecía tierra gratis; que se haga proselitismo a la población civil sobre la constituyente que Juampa “repudia” y en contra del plebiscito que “apoya”, y que bajo la amenaza de las armas se arengue la población inerme.
Fina demostración de como será el posconflicto. ¿O cabe duda?
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Parece poco probable que el acuerdo final pueda firmarse el 23 de marzo, pese al “ultimátum” de Juampa.
No se ha discutido ninguno de los “pendientes”; los nuevos insumos son complejos: salarios a los exguerrilleros, “estipendios” según Chamberlain Villegas; jubilaciones a los mandos de todos los niveles, a los responsables de apoyo, a los comandantes de bloque, al estado mayor y al secretariado.
La asignación de curules, diez al Senado, dieciséis a la Cámara, cuatro a las Asambleas y cuatro a los Concejos municipales.
La zonas de localización. La dejación de las armas con la clara advertencia de que “bajo ninguna circunstancia se admitirá el concepto ni el lenguaje de “entrega de armas”.
El cese al fuego bilateral, declarando vedado para las Fuerzas Armadas “(…) establecer nuevas bases o campamentos, incrementar las tropas, adquirir armamento y recursos bélicos, y la suspensión de programas de ayuda militar extranjera”.
La creación en el seno de la Policía Nacional de un cuerpo especial para la seguridad de los miembros de las Farc con la que deberá concertarse su composición.
La refrendación de los acuerdos en que se insiste en la constituyente a su medida.
La implementación de los acuerdos con la advertencia que las armas no serán entregadas antes de su cumplimiento.
Y para esto, que es el resumen de lo que hay entre el tintero, solo hay cinco semanas disponibles.
La alianza estratégica con el ELN ¿Cuales son sus alcances? porque como las brujas, que las hay las hay.
El Rincón de Dios
(…) cerremos los ojos y pidamos lo que nuestro corazón hoy quiera. Un ratito de silencio con los ojos cerrados y adentro pidiendo lo que queremos. Y ahora juntos digamos a nuestra Madre: «Dios te salve María…» Papa Francisco
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