¿Enemigo de la paz?
“La paz debe ser algo más que la ausencia material de combates: debe consistir en la calma de lo espíritus; debe reposar en una especial disposición de las conciencias; debe traer la inteligencia entre los adversarios políticos por el sacrificio de los rencores recíprocos; debe producir la aproximación de los que piensan y sienten como patriotas.” Rafael Uribe Uribe
He recibido amonestaciones por ser enemigo de la paz. Las acepto con cariño y las analizo sin prevenciones, es mi deber si me atrevo a escribir disparates y publicarlos en mi blog, redes sociales, y http://periodicodebate.com. Mis afirmaciones se basan en fuentes de entera credibilidad que callo por respeto a la seguridad y privacidad de quienes me las revelan.
No soy enemigo de la paz, pocos son enemigos de la paz. Diferente es aceptar la conducción que se da a las conversaciones de La Habana sobre las que tengo discrepancias. Expresar mis ideas algunas veces puede apartarme de la imparcialidad, lo hago a sabiendas, sin remordimiento, porque en momentos que se juega el futuro de nuestra patria no puedo abandonar el deber de expresar lo que me parece conveniente para su futuro. Si me equivoco, bienvenido, nada me haría más feliz que así fuera, no por mi, ya cumplí buena parte de la misión en este mundo, por el bienestar de mis hijos, nietos y bisnietos que merecen una patria libre y progresista.
Aunque se han citado autores del soy capaz, aplicado para formatear el disco duro de los colombianos y promulgado por la clase dirigente por creerse invulnerable y pensar que aquí no pasa nada y, minimiza, los amargos resultados de lo que hasta ahora se ha convenido. Otros caen en la trampa de la publicidad masiva que se ha dado al proceso o por incautos; y, algunos, por chupamedias del régimen a través del ingente consumo de mermelada gubernamental. Yo remito el soy capaz al Catecismo de la Iglesia Católica que en su capítulo primero define: “El Hombre es Capaz de Dios.”
Para ser capaz de Dios debemos ser capaces del perdón y la reconciliación; pero siguiendo la enseñanza del mismo texto ético, estas gracias no son gratis. Se hace necesario el reconocimiento de la falta, el propósito de la enmienda y cumplir la penitencia. Y basándome en esas premisas es donde empiezan mis dudas: ¿Reconocen o han reconocido las Farc sus crímenes? ¿Han demostrado su propósito de enmienda? ¿Están dispuestos a pagar por sus culpas y reparar a sus víctimas? Dejo a juicio de mis lectores las respuestas.
A quienes pensamos que estos supuestos no se cumplen, el gobierno nos tacha de guerristas, buitres, enemigos de la paz, para no profundizar en otros adjetivos infames que se nos endilgan. ¿Cumple el gobierno con este principio?: “…debe producir la aproximación de los que piensan y sienten como patriotas.” Quienes discrepamos del manejo del proceso ¿no pensamos y sentimos como patriotas? Los adversarios políticos superamos hoy la mitad de la población colombiana, no lo afirmo yo, lo reflejan las últimas encuestas.
¿Por pensar así soy enemigo de la paz?…
El rincón de Dios
“Resumiéndome, digo ser necesario a todo fiel cristiano que ningún día se le pase sin tener algún rato de lección y meditación y oración… porque la lección santa muestra el camino del cielo, la meditación lo anda, la oración lo consigue” Santo Tomás de Villanueva
No hay comentarios:
Publicar un comentario