Crónica 523

Ángeles y demonios

La decisión de la Corte Suprema de Justicia de condenar a Ramos Botero se presta a interpretaciones. Sabemos que algunos políticos se aliaron con paramilitares para buscar apoyo para las elecciones, otros en cambio, han sido condenados por el solo hecho de haberse reunido con ellos para buscar salidas que acabasen ese flagelo. Está bien que los primeros paguen por su delito, los segundos, deberían estar libres y exentos de culpa. También conocemos que se condena a quienes simplemente han tenido amistad con un paramilitar o pagaron a estos para defenderse de la Farc o el Eln que ya los habían secuestrado, asesinado administradores de sus fincas, o cometido delitos contra sus trabajadores o empresas. En Urabá este fue el pan de cada día.

Estoy con la justicia, pero no torcida o politizada. ¿Por qué está libre Teodora? Para ella las pruebas halladas en los computadores de ‘Reyes’, en los videos decomisados por la policía, sus declaraciones en Venezuela, Méjico y Estados Unidos, son inválidas, no existen; sus reuniones públicas vistiendo prendas de sus amigos terroristas en Caracas, nada significan. ¿Por qué están libres los integrantes de la Marcha Patriótica amigos de las Farc que incitan o infiltran paros y protestas? ¿Por qué están libres Iván Cepeda, el cura Javier Giraldo y Gloria Cuartas que han tenido contactos y conversaciones no propiamente angelicales con las Farc y otros grupos terroristas? ¿Se ha analizado el trasfondo de la “comunidad de paz” de San José de Apartadó? ¿Por qué el ‘secuestrador humanitario’ está libre pase a sus contactos con las Farc y el Eln, pero además fue asesor pagado por el gobierno para la restitución de tierras en Urabá donde fue depredador de agricultores y ganaderos? ¿Por qué a los que pagaron vacunas a las Farc y al Eln no se les condena igual que a quienes pagaron a paramilitares? ¿El desplazamiento forzado de las Farc no existe?

Mi tesis no es que no haya justicia sino que sea pareja. ¡O todos en la cama o todos en el suelo!

En cuanto a Ramos la cosa es más compleja: ¿Quería la Corte cortarle las alas a su candidatura por estar en el Centro Democrático? Tiene votos suficientes para poner en aprietos la reelección de Santos, ¿precipitar su orden de captura es agilidad de la justicia o producto de la mermelada gubernamental para enderezar este entuerto? No conozco las acusaciones que se le imputan, pero no creo que ameriten esta acción precipitada.

Para Santos convertido en el viagra político capaz de tener parado el país le cae de perlas, se quita un sambenito de encima; pero como van las cosas de golpe se le devuelve como bumerang y aumenta la fuerza de los candidatos del Centro Democrático, porque los que creen en Santos cada vez son menos.

El Rincón de Dios

“Señor Jesús, que pueda identificar las cosas que me encuentro diciendo constantemente, pero que no me esfuerzo en vivir concretamente; que me de cuenta de las cargas que impongo a los demás y que yo no quiero mover; que pueda ser consciente de las cosas que hago “para que me vean” o de las actitudes que fomento y acepto porque me dan cierto “status” o prestigio.”